Con Eleven eleven debutaron en 1992 con esa portada histórica que resulta tan misteriosa; una silueta se percibe en una oscuridad azulada en lo que parece ser un sillón, con una especie de imagen capturada en diferentes exposiciones, bien de algunas hojas de algún libro o el revoloteo de unas alas de paloma (¡diantre estoy aquí mirando el vinilo y aún así no lo puedo dilucidar!). El contenido de 11:11 si va a la zaga de la imagen del disco, las guitarras intensas y sucias acompañan a la desgarrada interpretación de Thalia Zedek, un reflejo del abismo personal en que se encontraba inmersa en esos momentos. Enganchada al tabaco hasta tal punto que la mayoría de las veces finalizaba sus cigarros sin quitárselos ni una sola vez de la boca, adicta a la heroína , “coqueteo” con las demás drogas y a la postre lesbiana, desde luego que no representa la imagen que América quiere dar al mundo de sus mujeres. No solamente sonaba a rock impetuoso, alternaba con movimientos lentos típicos del slowcore dando como resultado una tensión acrecentada que exacerbaba aún más los tormentosos tiempos de guitarra.
En 1994 publican Don't Ask Don't Tell donde siguen la línea del anterior trabajo pero resultando más homogéneos en su contenido, las subida y bajadas de intensidad dan paso a una un tupido guitarreo de medios tiempos, no resulta tan agónico como su primer trabajo pero si se puede perderse uno dentro de él ( vamos, como si fuera el The White Birch de Codeine pero dejando a parte el sabor slowcore) .
Near Life Experience se edita en 1996 y colaboran en el mismo diferentes músicos de la talla de Mac McNeilly de Jesus Lizard o John McEntire de Tortoise. Es el disco más corto de su trayectoria (apenas 33 minutos) , pero expresa toda la parte más furiosa de Come como ningún otro, algunas canciones rozan el hard-rock, a mi gusto el mejor que tienen, pequeñito pero matón.
Su último trabajo aparece en 1998, el extenso Gently, Down the Stream donde superan la hora de duración. Esta obra póstuma se presenta como un resumen de todo lo que ha sido Come, en él encontramos un poco de todas las características comentadas de sus anteriores discos.
Los proyectos que surgieron tras la disolución del grupo fueron más que interesantes, por una parte Chirs Brokaw se unió con Matt Kadane y Bubba Kadane (ex-Bedheads) para formar The New Year, que ahonda en el sonido más clásico del slowcore. Por la otra parte Thalia Zedek se aventuró en una carrera en solitario que se acerca algo más al sonido originario de Come que el grupo de su antiguo compañero. Los dos más que recomendables.
Submerge (Eleven eleven):
No hay comentarios:
Publicar un comentario